Crónica de un despido anunciado (y 2)
Cuando llegué al Dpto. Tupymorgan del OCM estaban de mierda hasta el cuello. Tanto que apenas tenían tiempo de explicarnos las aplicaciones a usar, que eran un huevo. Así que la mayor parte del tiempo estábamos mano sobre mano, esperando que el volumen de llamadas bajase para que alguien pudiese enseñarnos; mirábamos el correo, la prensa, webs de cursos, charlábamos... La primera queja contra mí vino a los tres días. Alguien dijo que siempre me estaba escaqueando y navegando por Internet. Por supuesto fue funcionarialmente miserable y mediocre y no me dijo nada sino que fue directamente a mi jefe, el G.G. Ante éste, me defendí diciendo que no podía escaquearme si aún no tenía trabajo del que escaquearme, ni PC propio, ni login. Y lo de Internet, coño, que no estaba en tiasguarras.com, que estaba viendo mi correo y la Cadena SER. Pronto descubriría que esta primera acusación vino de CODE , la COordinadora DEscoordinada, una mujer estilo Camila Parker Bowles. A pesar de su pinta machota,