Bailando al son del Pianista

Me llama el Pianista para encargarme un post. "Para que lo cuentes en El Teleoperador", dice. No "por si te puede interesar" sino "para que lo cuentes". Así, encargándomelo. Pues a mandar.

Los conocimientos del Pianista sobre escritura de guiones solo son comparables a su desconocimiento sobre el funcionamiento de las empresas de telefonía e Internet, lo que le lleva a cometer errores del calibre de contratar con Jazztel no solo el ADSL sino también la línea telefónica. Y así le luce el pelo, que cada dos por tres le va como el culo y cada tres por dos ni eso.

Harto ya de estar harto, llamó a Jazztel y pidió la baja con la paciencia y los circunloquios que le caracterizan: "Estoy harto de cortes. Quiero la baja", fueron sus palabras o, al menos, así me lo ha contado. En respuesta, la compañía le ha ofrecido un par de meses de ADSL gratis. Y el Pianista ha aceptado.

Moraleja: Jazztel es aún más tonta de lo que parece, porque si en vez de regalar meses de facturas garantizase que los 6 megas son 6 megas y no 6 meguchas, la gente seguramente pagaría encantada.

Consejo: Si tiene usted una conexión con Jazztel pruebe a hacer lo mismo, a ver si rasca bola, que se lo tiene merecido. Usted y Jazztel.

Recomendación, también del Pianista: Un post suyo que pensaba recomendar hoy o mañana y que titula "Barras y tono", aunque yo prefiero "Momentos de gloria". Un fragmento:
Yo respiré hondo. En peores plazas hemos toreado, me dije. Tenía unos diez minutos para hacer el trabajo de dos horas, pero llevaba el tiempo suficiente trabajando en la televisión para saber que la matemática euclidiana es una mariconada. Recordé aquella vez que tuve que hacer una entrevista multicámara con una sola cámara, y no hubo ningún problema; recordé aquel “programa estrella” que tuvimos que improvisar, sin guión y sin plató, y obtuvo las felicitaciones de todos los mandamases; recordé aquel spot que grabamos en media hora, con una Mini DV de cien mil pelas, y estuvo tres meses en emisión. Esto era pan comido.
Entero en Pianista en un Burdel. Lo ha recomendado hasta Íñigo Sáenz de Ugarte, que no enlaza cualquier chorrada. De hecho, a mí no me ha enlazado jamás.

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